Ir al contenido principal

Niños en cuarentena: "entre los avances y los retrocesos" (parte 1)


Estudios disponibles sobre la población infanto juvenil mostraron que, a partir del aislamiento, pueden atravesar una serie de problemas principalmente anímicos y de ansiedad. A qué señales estar atentos y cómo acompañar.Este es un trabajo de investigación realizado por un grupo de alumnas de Psicología social que quiero compartirles.



Incertidumbre, miedos, malhumor, angustia… las consecuencias de tanto aislamiento no sólo se evidencian en los adultos, sino que muchos niños y adolescentes también están experimentando los efectos colaterales de la inédita cuarentena.

Diferentes estudios internacionales se han encargado de investigar el modo en que la pandemia y el aislamiento obligatorio afecta la salud mental de las personas. En ese sentido, Francisco Musich, jefe del departamento de Psicología Infanto Juvenil de Ineco, explicó que en niños y adolescentes se han visto tres grandes grupos de posibles problemas: trastornos del ánimo, mayores síntomas de ansiedad y cambios en la conducta.

En un estudio realizado a 2.355 familias “Se observó que aumentan los problemas del estado del ánimo y esto se traduce en que los chicos empiezan a estar más irritables, nerviosos, algunos pueden empezar a estar tristes, más decaídos, los papas pueden notar que empiezan a ser menos las actividades que disfrutan, o se aburren y están más inquietos. Se alteran los patrones de sueño y de alimentación”, describió Musich, para luego añadir: “Algunos, sobre todo los que tienen cierta vulnerabilidad, pueden hacer cuadros de depresión, y eso amerita un tratamiento clínico especializado”.

Asimismo, apuntó que otros chicos empiezan con miedos, “ya sea como síntomas inespecíficos o trastornos establecidos de ansiedad, empiezan a estar más temerosos, se preocupan más, están todo el tiempo anticipando que puede ocurrir algo malo y están preocupados por eso”.

Respecto de los problemas de conducta, advirtió que el aislamiento puede contribuir a que, en aquellos niños que ya los tenían, se empeoren. Y en los que no los tenían se empiecen a manifestar: “Están más berrinchosos y, generalmente, las investigaciones muestran que en esos casos se vincula a un peor estado de ánimo”, puntualizó el especialista.

“Los padres de niños y adolescentes muy probablemente puedan evidenciar retrocesos o dificultades en áreas donde previamente no había problemas, como hacerse pis, que baje su rendimiento académico, que tengan más berrinches, que les cueste estar solos, que se pasen a la cama de los padres”, enumeró Musich.

No obstante, aclaró que no todos los niños y adolescentes van a reaccionar de forma negativa a la cuarentena ya que muchos de ellos lograran sobrellevarla de forma adecuada. “En dicha situación se abre la posibilidad para que las familias pasen más tiempo con sus hijos, permitiendo compartir más experiencias, aprendiendo cosas nuevas y mejorando el vínculo a nivel familiar”


Rendimiento escolar


En cuanto al impacto que estos efectos de la cuarentena pueden tener sobre el rendimiento académico, sabemos que “cuando el ánimo decae, no solo me siento más triste sino que eso genera cambios a nivel del funcionamiento cerebral”. “Empiezo a prestar menos atención y de menor calidad, empiezo a estar más desorganizado, me cuesta más retener las cosas, me cuesta permanecer sentado prestando atención y generalmente eso se traduce en una merma del rendimiento académico”




En ese sentido,  el estudio mencionó que uno de los grandes problemas de tratar niños y adolescentes es el diagnóstico diferencial porque en la mayoría de los casos consultan porque se están portando mal y porque les está yendo mal en el colegio. “Sucede que, en general, el ánimo deprimido se manifiesta de esa forma. A diferencia del adulto, que tiende a estar triste, en niños y adolescentes se ve mayor irritabilidad y falta de atención, desorganización, peor rendimiento en el colegio, peleas con la familia, con los compañeros o con los amigos”

Por lo tanto, el desempeño académico puede verse afectado. Y en este aspecto también tendrá gran influencia la modalidad de aprendizaje a la que se enfrente en el contexto de la pandemia. Mientras algunos establecimientos educativos han dispuesto rutinas diarias de clases virtuales y tareas, otros envían tareas cada 15 días. “En ese último caso, es más probable que el chico muestre retrocesos porque está perdiendo la costumbre de estudiar”


En el próximo artículo veremos el rol de la familia y cómo ayudar a nuestros hijos a vivenciar esta etapa de pandemia.






Adriana Reschia
Lic. enPsicología social

 


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Alimentos no saludables en la infancia

Un reporte basado en la revisión de 57 estudios identifica impacto de elementos como personajes en el consumo de alimentos no saludables en la infancia.

Cómo nace “Lazos de Esperanza”

Lazos de Esperanza es un grupo de guerreras que le ganaron la batalla al cáncer. Muchos lo conocen por su actividad con las pelucas o los gorritos, pero son mucho más que eso.

Tameana: ¿Qué es y cuáles son sus beneficios?

Tameana es una técnica de sanación con cristales de cuarzo y códigos de activación de origen Pleyadiano.